1. Ahora mismo no me acuerdo si eran 85.8 o 85.9, pero tanto da. Qué ha pasado?!
2. Tomé una bebida de las de cero calorías, y de cena carne de pavo, unos tomatitos cherry, queso 0% y una pequeña rodajita de pan integral (que decían que sabía muy bien y quería probarlo). Caminé durante unos 25 minutos. Supongo que me desvié tanto por la cena, pero no comí nada que no debiera!
3. No voy a comer ni a hacer ejercicio.
4. Pesaré... 85? Jo, que deprimente.
Creo que esta subida de peso es ni más ni menos que una consecuencia lógica de haber elegido cenar en vez de elegir no cenar y tomar una infusión o como mucho lo que toma mi padre a menudo: tazón grande caliente de leche desnatada-agua (más de la mitad)-cacao 99%-sacarina-levadura de cerveza.
Creo que a veces es mejor acostarse con hambre, máxime viendo que a la tarde había logardo llegar a 84,9 (es decir, si hoy por ejemplo me hubiese encontrado con ganas de no cenar nada y lo hubiese hecho, me habría acostado con 84,5 y mañana podría levantarme con menos de 84, casi seguro.
Quiero decirte con esto que, viendo lo que peso al llegar del cole, y dependiendo de cómo me encuentre mentalmente para hacer un esfuerzo y no cenar nada que me aporte calorías, podré dar un salto de varios cientos de gramos para el día siguiente. Luego se trata de comer con cuidado, para mantenerme en esa posición, pero ya lo habré alcanzado.
Me dijo mi padre que él hoy se levantó con 76,5 Kg (después de los excesos de sábado a la noche y domingo al medio día y después de haber pesado el día dos su récord absoluto de 72,5 kgs). Entonces estaba motivado para no comer prácticamente nada hoy lunes y así lo hizo pero sin embargo engañó al estómago con varias infusiones y un par de tazones de agua (90%)-lech(10%)-cacao puro-sacarina (3 ó 4 bolitas) y levadua de cerveza. Y además de eso comió un plato de sopa al medio día y 2 gelatinas (una a la tarde y otra a la noche). Es decir, que en total le metió al cuerpo 150 ó 200 Kcal: su cuerpo no tuvo más remedio que quemar grasa y además al estar casi sin comer nada, su cuerpo debió ir limpiando del exceso de los otros días y espera pesar mañana un par de kilos menos o algo por el estilo.
Yo creo que meter sólo 150 ó 200 Kcal en el cuerpo de uno en todo un día es una barbaridad, bueno tengo que matizar: es una barbaridad si lo hace día sí y día también. Sin embargo si lo hace una vez a la semana (o incluso un día a la semana come 0 Kcal) no pasará absolutamente nada (de hecho muchas personas ayunan un día a la semana y parece que están mejor).
Para hacer un último esfuerzo al dinal del día, yo creo que todo dependerá de cómo se encuentre uno en ese momento, pero si me encuentro con capacidad mental para asentarme un poquito más alto y un poco más cerca de la cima, pues ¡a hace el esfuerzo!, que así mañana a la mañana me encontraré más cerca de la cima. Sin embargo si uno no se encuentra con ánimo, pues cena con control, cuando se levante a la mañana pesará más o menos igual que el día anterior para el caso de que no hubiese hecho nada de ajercicio y haber comido más o menos alimentos con un aporte energético más o menos igual que los consumidos el día anterior (si hubiese hecho ejercicio habría quemado alguna grasa más y hubiese compensado algo el haber comido los tomatitos cherry y el pan a la cena y el palito de pan al medio día).
Tengo que tener cuidado con los hidratos de carbono, sobre todo si apenas me aportan nada de satisfacción en el momento de la comida, porque al medio día la pasta ya la tenía que comer porque era así como venía el plato, pero ¿no me daría casi igual comer el plato de pasta y pollo sin ese palito de pan? Yo creo que sí, y además, a la cena ¿qué me aportaron los tomatitos cherry y el trocito de pan? Nada, podría ir a la cama perfectamente sin ellos, pero debería tener algo que los sustituyese o enredarme en leer algo y así se me pasaba el tiempo sin enterarme.
Mi padre me dice que él prefiere esforzarse fuerte los días que sea necesario y sin embargo otros hacer unas comidas enormes. A él le parece mucho mejor para su manera de ser que el de privarse todos los días de cantidad y sin embargo tomar variedad de cositas, algunas de las cuales aportan muchas calorías, sobre todo al ir unidas a otros alimentos, como es el caso del pan.
Bueno, afortunadamente en algunas cosas y desgraciadamente en otras, yo no comparto al 100% la opinión de mi padre con respecto a hacer enormes excesos algunos días y luego otros pasar "unha fame negra".
Con respecto al pan me cuesta eso de tomarlo únicamente en el desayuno en un gran tazón de leche desnatada-agua-cacao puro-algo de edulcorante-pan integral y luego no comer absolutamente nada de pan en todo el dia y sé que los días que le eche pan al tazón de agua-leche de desayuno debo echarle la levadura de cerveza y los otros días que no le eche pan le puedo echar el salvado de avena (y no levadura, que debo dejarla para el tazón de leche-agua-cacao de la noche).
Me siento como si estuviese escalando una montaña. Según como me encuentre de ánimo cada día al llegar del cole, puedo hacer un último esfuerzo ese día y no comer nada, sino sólo beber cosas sin calorías (y mejor calientes, pues tengo que tomarlas más despacio y me dan más sensación de llenarme el estómago, o tomar un yogur o 2 o algo con muy pocas calorías. Por no cenar nadie se muere, y tomando el complemento vitáminico y de minerales que me aporta la levadura de cerveza, yo creo que me será suficiente (al menos a mi padre, según él, pareace que le fue suficiente). Todo dependerá de cómo me encuentre ese día para afrontar un último reto del día y posicionarme un poco más cerca de la cima el día siguiente.
También otra opción sería hacer una dieta de choque de Dukan de sólo proteinas durante 6 ó 7 días y sería comer sólo proteinas y beber mucha agua desde el levantarme hasta acostarme y cada día bajaré 500 ó 600 gramos, que en 7 días serían casi 4 kilos. A lo mejor, haciendo eso, después me resulta más motivador y más fácil ir haciendo esfuerzos pequeños de vez en cuando según me vaya encontrando con ánimo, pues estaría de golpe (en tan sólo una semana) en 81 kilos.
Tengo que pensar detenidamente qué creo que me resultará más fácil y si es la dieta Dukan estricta tendré que llevarme mi comida al cole (huevos cocidos, bistecs de pavo, pollo o ternera a la plancha, que la verdad me apetece un pimiento super picante). Podría comer todos los bistecs, pescado a la plancha, yogures 0% y queso 0% y leche desnatada que me de la gana durante esa semana, pero NINGUNA OTRA COSA (salvo el agua que es obligatoria y una infusión que me vendría muy bien). Y si eso me da resultado, sería repetir un día de sólo proteinas a la semana y el resto de días ir mezclando proteinas con verduras, pero sin otros hidratos de carbono. Así podría bajar en una semana otros 2 kilos más y ya estaría por debajo de 80.
Por ahora estoy experimentando qué método seguir para lograr el objetivo y creo que lo estoy haciendo medianamente bien, porque estoy escribiendo y pensando (escribiéndolo además) lo que compruebo en mi propio organismo y empiezo a darme cuenta qué es lo que me provoca incremento de peso y qué es lo que me provoca bajada de peso y por tanto estoy en disposición de saber qué tengo que hacer para dar un paso más hacia la cumbre.
Este ejercicio lo veo necesario para ir adquiriendo conciencia de que el llegar al objetivo es una tarea mía y sólo mía y que tengo que trabajarla con tesón y sin desviaciones de ningún tipo (la libretita pequeña en la que debo apuntar cada desviación antes de hacerla, me cuesta llevarla, aunque sé que me podría ser útil, pero ¡es un engorro!.
Y me sería muy útil, pues entre que sé que tengo que escribir la desviación que tengo pensado cometer y que debo tenerla escrita antes de hacerla, igual por vaguería y no escribir acuerdo en último instante no cometer esa desviación). Eso de utilizar esa libretita y escribir todas las desviaciones que unos segundos después voy a cometer hará que al menos algunas de ellas no las cometa y por tanto, como mínimo, gracias a la libretita cometeré menos, pues iré controlando muy estrictamente esas desviaciones.
Lo más importante por ahora es que me obligue a escribir, para tener conciencia de los pasitos que voy dando y de los tropezones pequeñitos que, también manera inevitable, voy a ir dando a lo largo del ascenso a la cima. Pero es preciso controlar esos tropezones pequeñitos, para poder llegar de manera más fácil y con menos frustraciones a la cima.
Así que ánimo!!!, I CAN!!!
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